El Senado rechazó este miércoles el proyecto de Ley de Ficha Limpia, impulsado por el oficialismo con el objetivo de impedir que personas condenadas por delitos contra la administración pública puedan presentarse a cargos electivos. El resultado fue 36 votos a favor y 35 en contra, uno por debajo de la mayoría requerida para su aprobación.
La votación representó un nuevo revés legislativo para el Gobierno nacional, que esperaba avanzar con la norma como símbolo de su promesa de combatir la corrupción. La sorpresa vino desde el bloque del Frente Renovador de la Concordia, ya que los senadores Carlos Arce y Sonia Rojas Decut, que se esperaba acompañaran la iniciativa, finalmente se pronunciaron en contra.
Tras el resultado, la Oficina del Presidente difundió un duro comunicado, en el que calificó el rechazo como un acto de protección hacia "los afiliados al Partido del Estado" que "continúan impunes". El texto agrega que el presidente Javier Milei aborrece la decisión de los legisladores que, según su mirada, optaron por "la defensa de sus intereses personales y partidarios por encima de las demandas del pueblo ".
En el mensaje, la Casa Rosada apuntó especialmente al bloque kirchnerista, al que acusó de hacer "cuanto sea necesario para defender la impunidad de sus jefes ". Además, vinculó este resultado al rechazo reciente de los pliegos propuestos por el Gobierno para la Corte Suprema, como parte de una supuesta estrategia para garantizarse protección judicial.
"El Senado de la Nación se consolida una vez más como el refugio de la casta política argentina ", sostiene el comunicado.
A pesar del traspié, el Gobierno aprovechó el escrito para agradecer el acompañamiento de los bloques aliados, entre ellos, el PRO y sectores independientes, y aseguró que el Presidente "no descansará hasta que Ficha Limpia se convierta en ley ". Para Milei, se trata de una medida clave para garantizar"que la integridad y la justicia prevalezcan en la política argentina".
EL COMUNICADO:
