El Gobierno nacional analiza nuevas medidas para incentivar el uso de dólares propios para transacciones diarias, luego de la débil respuesta en los primeros meses de vigencia de la competencia de monedas.
El ministro de Economía, Luis Caputo, anunció que en dos semanas se lanzarán una serie de medidas para fomentar el uso de divisa extranjera con el objetivo de monetizar la economía.
El Gobierno entiende que la cantidad de dinero en la calle disponible para transacciones es la mitad de lo que necesita la economía, lo cual debe incrementarse para fortalecer la expansión de la actividad.
Las evaluaciones del Gobierno se dan en medio de una discusión por la heterogeneidad del progreso del consumo interno, con un consumo doméstico aún en niveles insuficientes para empujar a la producción y a la inversión.
De allí que cada vez con mayor insistencia comienza a escucharse en los discursos oficiales la necesidad de “monetizar la economía” que en otras palabras resulta “ponerle plata en el bolsillo a la gente”.
Dada la concepción libertaria del Gobierno y la restricción a la emisión monetaria, esa monetización se buscará por dos vías: por un lado el canal del crédito al sector privado. Una mayor demanda genuina de los privados, llevará a los bancos a prestarle menos al sector público, refinanciando menos vencimientos de deuda, que deberán ser cubiertos con pesos en poder del Tesoro. En el Gobierno aseguran que este tipo de inyección de pesos a la economía no es inflacionaria porque provendrá de una demanda genuina.
La segunda alternativa para que haya más circulante para transacciones es convencer a la población que use sus dólares para algo más que la compra de autos o inmuebles.
A principios de año el Gobierno dictó una serie de medidas para favorecer el pago de todo tipo de bienes y servicios con dólares depositados en cuentas. De hecho, cualquier consumo (una vestimenta, o una comida, o lo que fuera siempre y cuando el comercio también lo acepte) puede hacerse en dólares con una tarjeta de débito sobre una cuenta en esa moneda.
Pero esta opción que fue el puntapié para la competencia de monedas aún no se internalizó en la población. Al menos así se desprende de dichos informales de bancos y comercios.
De allí que el Gobierno insistirá en las próximas semanas con nuevas medidas para darle más opciones a la gente y que use sus dólares.